Desde que regrese de Pamplona no he parado. Volví al trabajo y fue una alegría, echaba mucho de menos a mis compañeros, sus bromas, las cañas después del trabajo, los cotilleos con un café por delante, el poder hablar con gente de mi edad, recuperar mi vida.
El día de reyes estuve comiendo fuera con algunos de ellos y me hizo mucho bien, hacía tiempo que no despejaba mi cabeza. Aunque el final del día podía haberse borrado. Me encontré con Silvia y con su novia. Al principio ella se hizo la despistada y yo también, pero el destino quiso que coincidiésemos en el cine. Ella ya no pudo disimular. Nos saludamos como si fuesemos dos conocidas sin más. Y me resulta difícil verla así después de lo que he compartido con ella. Aunque al final me alegró Ana el día, porque cuando salimos de cine le dije quien era, la historia ya la conocía, y me comento que la novia no me llega ni al tobillo. Que se joda.
El resto de la semana la he pasado trabajando, mucho trabajo para ponerme al día. Ya no solo en las horas de oficina, sino en casa también, aunque me lo hacía más llevadero crónicas marcianas que ya las echaba de menos. Y el fin de semana fui a casa de mis padres, a por mis reyes y a llevarles los suyos. Desde hace años los de mi madre son los mismos, pero me encantan: una paella que las hace divinas y de postre tiramisú que está para chuparse los dedos. Y el regalo de mi padre es la conversación que solemos tener que tanto echaba de menos. Otro día os hablaré de mi padre.
Este fin de semana he quedado con Ana y varios compañeros, aunque todavía no tenemos pensado que vamos a hacer. Hay varias propuestas sobre la mesa, pero como ya sabeis mi indecisión pues no seré yo quien elija.
Hoy me siento un poco extraña. Después de no haber tenido unas horas libres para mi misma con lo de mi tía, se me ha hecho raro, largo y cuesta arriba tener un día completo. Me he levantado temprano, creo que me he acostumbrado, lo mismo que a dormir a ratos, cualquier ruido me hace despertar, supongo que será el subconsciente.
He dedicado el domingo a limpiar, a poner lavadoras, a planchar y a ver un poco la tele, que hoy ha vuelto Siete vidas y me encanta. Ahora en telecinco está el debate de gran hermano, pero como no he podido seguirlo pues como que no me interesa mucho verlo. Asi que he decidido navegar un rato y postear algo.
He llamado a Silvia, primero estaba comunicando y a los cinco minutos cuando la he llamado de nuevo no ha cogido el teléfono. Después le he mandado un mensaje, diciéndole que ya estaba de vuelta que cuando tenga un rato libre me gustaría tomarme un café con ella, pero no me ha contestado ¿qué será? No quiero darle muchas vueltas, pues su actitud ha quedado bien clara. Pero eso no evita que me sienta mal.
He pensado en llamar a algunos amigos pero entre las fiestas, que hoy está todo abierto y que tienen que ultimar las compras de reyes pues no he podido quedar con nadie. He pasado todo el domingo sola en casa.
Ojala que a partir de mañana las cosas cambien, por que hoy por hoy me siento muy sola e incluso asustada.
Ha pasado poco tiempo, algo más de un mes. Sin embargo si han sucedido muchas cosas en mi vida. Primero me tuve que trasladar a Pamplona, a acompañar a mi tía en los últimos momentos de una enfermedad que hace unos días acabo con su vida. Desgraciadamente no ha sido la única despedida. Al principio Silvia lo acepto muy bien, y las dos nos conformábamos con las llamadas diarias, pero la relación se ha ido enfriando. Yo no podía hacer nada, mi lugar era estar allí con mi tía, que no tiene marido ni hijos, y Silvia no ha querido luchar. Tanto es así que a la semana de dejar nuestra relacion en "pause" se lió con otra. Y claro con lo celosa que yo soy, he preferido cortar totalmente esa relación. Hemos quedado como amigas, pero supongo que la veré un par de veces más y desaparecerá de mi vida.
Lo mejor de todo es que no me ha afectado tanto como yo me había imaginado, lo llevo bastante bien. Supongo que el trance que he vivido con mi tía me ha hecho madurar bastante y ver lo que es importante, lo que no, conformarme con lo que es y con lo que no y un gran ecétera.
Cambiaremos de tema. He visto que zonalibre ha crecido muchísimo en este tiempo de ausencia, cosa que me alegra, pero por favor seguid leyéndome que necesito desahogarme y muchas veces consejo, jejejeje que hay tiempo para todos los blogs.
Y bueno ya que estamos a día 3 de enero, desearos un feliz año y de paso desearmelo a mi también, ya que estamos.
Y mañana a preparar todo para volver al trabajo el lunes. Afortunadamente mi jefe ha sido comprensivo y me ha dado este tiempo de excedencia y puedo volver a ocupar mi lugar. Tengo muchisimas ganas de ver a mis compañeros, aunque no he perdido el contacto con ellos, principalmente con Ana que ha sido mi pañuelo de lágrimas telefónico. Ay vodafone que te estas forrando conmigo. Alguien sabe si vende acciones?
Me alegro de volver a estar por aqui. Ahora a ponerme al día de los demas blogs. Y sólo pedir que no vuelva a desaparecer, a menos que sea por algo bueno.
Al que haya llegado aqui, gracias por volver a leerme y vuelve pronto.